viernes, 2 de abril de 2010

Me vendo mentiras, me compró pretextos, imagino amores
muertos, otros tantos que están vivos, una ilusión, un desagrado
una persona sana y otra a su lado CONSUELO.

La luna te contempla, te envuelve, sabe que existes
sabe que te pienso, sabe que no te tengo, tal
vez conoce porque no te tuve. A lo largo
del cielo busco un consuelo algún amor desvenido
alguna adivinanza que ayude al dolor, una parte
de mi se ahoga, no quiere pensar, lo retine,
respira y se queja, escucha sin querer, habla y calla.

Llorar es sufrir, porque no hay más quejas que
se pueden encontrar en este desamor, en esta fantasía, en un corazón roto,
en unos recuerdos infundados, en caricias que nunca existieron, en abrazos
que se fueron, en una historia que murió sin empezar.

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